domingo, 10 de junio de 2007

¿Qué es más importante? ¿El Plan o la ejecución?

Pasamos la vida haciendo planes. Cuando somos niños, nuestros padres planean por nosotros. Cuando crecemos, planeamos nuestro futuro, nuestro estudio, dónde queremos trabajar, que queremos hacer de la vida. En medio de tanto plan, lo vamos ejecutando, pero no nos damos cuenta. Planeamos todo el tiempo, planeamos la conquista de un mae y nos planeamos una vida perfecta. Pero hay otros que no planean, o planean no planear. También están los que son pésimos ejecutando aunque su plan sea perfecto. Hay otros que no planean, pero mientras ejecutan todo les sale bien... ¿Qué es lo más importante?... Depende del resultado

domingo, 27 de mayo de 2007

¿Dónde está la diferencia entre la percepción y la realidad?

¿Cómo diferenciamos los sueños de la realidad? ¿Cómo lo hacemos si queremos que nuestros sueños sean realidad? ¿Son percepciones? ¿Son realidades? ¿Son sueños? ¿Dónde está la diferencia? ¿Cuál es la diferencia?

domingo, 13 de mayo de 2007

¿Quién me ha robado el mes de abril?

Se que tengo un tiempo considerable sin escrbir, pero a veces necesitamos alejarnos de nuestra cotidianidad para descubrir cosas nuevas. En realidad no es solo un quién me ha robado el mes de abril, sino más bien qué? y cuando me doy cuenta, me lo ha robado lo cotidiano!

Me lo ha robado las noticias acerca del TLC, me lo ha robado mi exceso de trabajo y mi búsqueda para desconectarme del mundo los fines de semana, me lo ha robado el gimnasio y mi intento por cuidar un poco mi salud, ya que el cigarrillo en algún momento me va a matar.

Estuve fuera de Costa Rica un tiempo... Definitivamente lo que más me gusta de viajar es la sensación cuando regresas, aunque el día que vuelves te das cuenta que tomaron la Embajada de Rusia. Sin embargo, amo a Costa Rica... amo escuchar mae, amo que me digan me regala un momentico o me regala un café, cuando realmente no te lo regalan, te lo venden, amo escuchar que playada y nada que ver en la misma oración.

Y así estoy regresando hoy a la vida por Internet, de nuevo... Porque nunca hay nada seguro!! En la vida, lo único seguro es el momento que estás viviendo.
Es como cuando dices, me emborraché... casi... me enamoré, bueno creo... Mañana voy para tal lugar, espero...

domingo, 18 de marzo de 2007

¿Por qué nos complicamos?

Nos encanta complicarnos. Necesitamos tener esa emoción en nuestras vidas. Necesitamos llorar, patalear, sentirnos ansiosos, nerviosos, inyectar nuestras vidas de emociones; algunas pasajeras, algunas duraderas. Necesitamos bofetadas en la cara y golpes en el corazón. Necesitamos ser felices por instantes, como si se esperara después una mala racha.
Y necesitamos "comer mierda" para saber lo que es tocar la gloria, necesitamos llorar para saber que es reír, necesitamos rasparnos las rodillas para saber lo que era sentirlas lisas, necesitamos despellejarnos para apreciar nuestra piel... Necesitamos de lo opuesto, cruzar líneas prohibidas, atravesar límites y equivocarnos...
Necesitamos tanto de tanto que suplicamos por experiencias nuevas, nos aburre lo mismo... Tal vez hoy yo soy más de lo mismo caminando en calles diferentes, o soy diferente caminando por las mismas calles.

viernes, 23 de febrero de 2007

No soporto

¿Que no soporto? Hace unos años recibí un correo de las actitudes que no soportamos. Como parte de sus frases decía que no soportaba la gente que te veía en el cine y te preguntaba que estabas haciendo, la respuesta era obvia... Recuerdo la hilaridad que me provocó ese correo con sus múltiples y sarcásticos ejemplos.
Pese a eso, y con los años a cuestas he podido engrosar mi lista de momentos insoportales....
No soporto las personas que no te dejan hablar porque solo quieren hablar de sí mismas y si vos tuvieras la palabra solo hablarías de vos misma
No soporto la gente que te restriega su felicidad en la cara cuando vos sos un amargado y no has podido ser feliz
No soporto la gente que se burla de los demás con cinismo, sarcasmo y un humor particular pero si tuviera esa habilidad haría lo mismo.
No soporto a los que ni siquiera se soportan a sí mismos.

P.D. En medio de la insoportabilidad del ser, volví a mi mundo a ver si sigo soportándome

lunes, 8 de enero de 2007

El poder de la memoria

Siempre me he sentido orgullosa de mi buena memoria. He creído que mi memoria de elefante hace que todos me cuenten sus historias para que dentro de 5 años yo se las recuerde, con lujo y detalles.

“Yo nací para recordarle a la gente las cosas” Esa es mi misión en la vida. Soy la que llama a sus amigos para decirles hoy cumple años tal persona, recuerde llamarlo. O decirle a mis compañeros, recuerde que hoy tiene que hacer esto. O cuando están contando una historia y me preguntan pero no recuerdo como fue eso, Laura te recuerdas? Siempre tengo la respuesta exacta.

Ha sido mi mayor ventaja y la gente comenta mi capacidad de almacenamiento en mi disco duro con sorpresa, asombro y hasta dudando si hago trampa para recordar cosas.
Pero hoy, ya no quiero recordar. Prefiero dejar mi “gran” habilidad de lado.
Descubrí por qué soy tan buena recordando, y es que además de saber recordar me gusta vivir del y en el pasado… ¡Qué mal! Prefiero no tener memoria.

Las personas que no tienen memoria solo viven hacia delante. Aunque quisieran no pueden recordar. Así que poco a poco, voy a ir castigando a mi memoria. Ya no le recordaré a mis amigos los cumpleaños de nadie, ni le diré a la gente que se recuerde que me había dicho que por favor le recordara hacer equis cosa, ni recordaré las historias. Cuando alguien me pregunte si puedo recordar aquella historia, responderé con una sonrisa: Lo siento, no recuerdo, me falla la memoria.

martes, 2 de enero de 2007

¡Trágame tierra!

Para el 2007 no voy a hacer ningún propósito nuevo. Igual, nunca los cumplo!!! Me conformaré con lo que venga. Sin embargo, espero decir menos: ¡Trágame tierra! En nuestras vidas ¿Cuántas veces hemos dicho trágame tierra? Y lo peor aún es que la tierra no te traga… NUNCA!!!

• Primero, la clásica... Estar hablando en una fiesta acerca de alguien y aunque te retuercen todos los ojos y te tocan el brazo, en el preciso momento que decis algo sobre esa persona, todo mundo conspira para guardar silencio y vos, al mejor estilo del “chavo”, hablas en tu tono de voz más alto, mientras esa persona pasa a tu lado, en medio de las diferentes expresiones de todos...

• Están también las trágame tierra por descuido… Por ejemplo, cuando le envías a un chico el mensaje de texto que era para una amiga, acerca de su cita de ayer y tras de eso él te lo responde, y ojalá haya sido una mala cita.

• Lamentablemente, también somos culpables de muchos trágame tierra… esas que te pasan por mentir…Decirle a un amig@ que no vas a salir porque estas enferma y encontrártel@ a la medianoche sumergida en un fiestón, pero sin tu amig@

• Las mejores son las inesperadas, porque ninguna de estas situaciones las ves venir… si las vieras venir harías lo imposible para esquivarlas, porque sino la gente llegaría a pensar que te gusta meterte en problemas o que sos un idiota. Despertar después de una borrachera al lado de un mae, salir de su casa y en la entrada de la puerta su madre quien viene de visita y te invita a pasar el día con ellos: Tu, (el burro por delante, por supuesto ¿dónde más vas a estar?), el mae del que estás huyendo y su mamá.

• También están las entradas triunfales de otros que para uno significan trágame tierra: Estar en un bar con un chico y observar, como en cámara lenta, entra por la puerta tu otro galán y darse cuenta que además de frecuentar el mismo lugar, gustarle la misma chica, también se conocen y más tiempo de lo que vos los conocés a ellos. O también cuando jugas de artista y te desgalillas en un karaoke con una de esas canciones de desamor y ves a tu ex entrar por la puerta mientras vos estás subida en la tarima y no vas a volver a pegar ni una sola nota (¿quién dice que antes sí pegabas las notas?)

A través de los años recopilamos una lista enorme de “trágame tierra” y esperamos, fehacientemente, que con los años, la tierra nos trague menos. Al final de cuentas, mis tragadas de tierra, las tuyas y las de los otros, se convierten en historias de una mesa en un bar, el mismo día que una nueva tragada de tierra está a punto de aparecer, esperándote, a la vuelta de la esquina.